Nota: este NO es un artículo técnico sino una explicación para
usuarios básicos de qué y cómo ha podido haber una infección de
malware tan extendida y con tanta repercusión mediática. Los artículos técnicos
que he consultado para ilustrarme están al final de la entrada (y
merece mucho la pena leerlos).
El pasado viernes, a eso de media mañana, el informático de la Sala
se acerca y me dice: “Echa un ojo a las noticias: hay una infección
“gorda” ahí fuera”; pero se quedó en eso, ya que la carga de
faena -y una feliz celebración a recién-papás lo impidieron.
Tres de la tarde, saliendo del trabajo y ya con cobertura la cuenta
de Twitter y, especialmente las de Telegram, estallaban a mensajes:
algo inusual estaba pasando. Vamos, como que decían que Telefónica,
Iberdrola y alguna otra empresa grande, incluso extranjeras, se
“habían caido” por un ataque informático. Las orejas tiesas
¡era algo grande de verdad!
El viaje de vuelta a casa en tren, aún a pesar de haber dormido muy
poco la noche anterior lo hice, contrariamente a mi costumbre,
totalmente despierto y conectado, viendo cómo bajaba alarmantemente
el niveĺ de la batería del móvil; pero no podía, no quería
desconectar… estaba enganchado al devenir de la infección que se
prometía mundial.
¿Qué pasó?